¡Preparaos para ensuciaros las manos, guardias! Prison Architect: Going Green lleva la agricultura a tu prisión con cultivos, exportaciones de productos y muchísimo contrabando.

Destacados

• El fruto del trabajo: La agricultura es un nuevo tipo de trabajo penitenciario que permite cultivar patatas, trigo y manzanas, entre otras cosas, en las prisiones. Los productos cosechados pueden exportarse o usarse como ingredientes para la comida de los reclusos.
• Espacio para el cultivo: Hay tres zonas exteriores que facilitan el cultivo (el vergel, el campo agrícola y la parcela). Pero eso no es todo. Además, los jugadores pueden reclutar a trabajadores agrícolas, construir almacenes para guardar la cosecha y armar cobertizos para las herramientas de labranza.
• Mejores brotes: Los reclusos que aprecian la belleza de la naturaleza ya pueden cultivar flores y otras plantas para entretenerse. La jardinería afecta a los reclusos y les proporciona una actividad recreativa positiva.
• Se avecinan problemas: A más cultivos, más contrabando. Los presos pueden cultivar hierbas en secreto y robar ingredientes de la cocina para elaborar bebidas alcohólicas. Los campos también pueden convertirse en territorios controlados por bandas, ¡así que mantén alerta a los guardias!
• Una iniciativa más verde: Las prisiones se convierten en lugares respetuosos con el medioambiente gracias a las fuentes de energía eólica, solar y eólico solar. La energía sobrante que producen estos métodos sostenibles puede volver a venderse a la red eléctrica a través del medidor de exportación de energía.